Estafadores de bodas: los estafadores hicieron pasar vestidos chinos baratos por vestidos de novia caros.

Estafadores de bodas: los estafadores hicieron pasar vestidos chinos baratos por vestidos de novia caros

Toda novia sueña con caminar hacia el altar con un lujoso vestido blanco como la nieve. Resulta que la reputación del salón y el alto precio del producto no garantizan que no se compren falsificaciones chinas.

En la ciudad británica de Newport, situada en el sur de Gales, hay una tienda de bodas en una de las calles centrales. Las novias locales que han recibido propuestas de matrimonio acuden al salón Anna Sara Bridal en busca del vestido de sus sueños. La tienda de vestidos de novia es pequeña, pero a los residentes les encanta por sus atentas propietarias, Melanie, de 36 años, y su madre Patricia, de 60, y por la selección de hermosos vestidos.

El costo de los productos varía de 700 a 1000 libras esterlinas (de 56 000 rublos a 82 000 rublos). Este precio, según los propietarios de la boutique, se debe a los tejidos exclusivos y al trabajo artesanal.

Las cosas iban bien en la tienda hasta que una de las novias descubrió una etiqueta en su vestido de novia que decía hecho en China. La frase, que no necesitaba traducción, significaba sólo una cosa: aquí no se hablaba de trabajos de alta costura ni de tejidos de élite.

Los medios británicos llevaron a cabo una investigación completa y descubrieron que madre e hija compraron vestidos de novia en China por no más de 40 libras esterlinas (unos 3200 rublos). En el curso de cálculos matemáticos simples, queda claro que los empresarios prudentes obtuvieron veinte veces más ganancias por la venta de un producto. Las mujeres no negaron su culpabilidad y ahora están recaudando dinero para pagar una multa sustancial y una compensación a las novias engañadas.